“Ayer fue un día muy triste para mí. Dormí muy mal, lloré toda la noche y la angustia me creó un nudo en el pecho. Estoy destrozada”. Así vivió Nazarena Vélez la muerte del ex-presidente Raúl Ricardo Alfonsín. En comunicación directa con este magazine de medios y espectáculos por otro tema, la vedette se dehaogó sobre el tópico del día. “Veía a la gente que iba a despedirlo y pensé que yo también debería hacerlo, tal como lo hubiese hecho mi abuelo, que era radical y el resposable de que hoy yo sea radical", confesó.
“Mi hija Barbarita me pidió despedirse después de verme mal toda la noche. Ella me preguntó quién era ese hombre que me hacía llorar y yo le dije: ese hombre fue un héroe”.
“Recuerdo la primera vez que lo ví. Yo tenía 10 años y acompeñé a mi abuelo a la Plaza de Mayo. Yo estuve ahí cuando él dijo la famosa frase ´la casa está en orden´y todavía recuerdo el abrazo que se dieron mi papá y mi mamá en ese momento”, dijo, conmovida.
“Yo siempre supe lo importate que era la democracia. Mi papá y mi mamá son personas de la cultura que me hicieron saber desde temprano la importancia de poder votar, de poder elegir el destino de un país”, profundizó.
Naza reflexionó: “Se va este héroe, esta persona maravillosa que luchó tanto por los derechos humanos y creo que cualquier persona que viva con consciencia los acontecimientos políticos del país debe sentirse tocada. No murió cualquier persona, murió el Señor Raúl Alfonsín”.
Años después de ese primer encuentro, ella tuvo la oportunidad de volverse a cruzar con el ex-presidente en alguna ocasión pero jamás pudo dirigirle la palabra: “realmente significó mucho para mí".
Fuente: Puroshow
Susana regresó de Punta del Este sin que nadie se enterara y aprovechó para salir al teatro. Anoche fue a ver “Eva, el gran musical argentino”.