Crece la atracción física entre Dante (Gastón Pauls) y Magui (Lucrecia Blanco) que finalmente hacen el amor aunque ella sabe que él ama a Ana (Carla Peterson). Dante intenta comunicarse con Ana pero se desencuentran.
Ana busca viajar al pasado, pero cuando se despierta el supermercado está a oscuras y Víctor (Rafa Ferro) la llama para que lo ayude. Ana asombrada, descubre que no logro viajar.
Allí entre tinieblas, Victor encara a Ana por su traición. La situación se torna violenta y está a punto de repetirse la circunstancia del asesinato de Víctor por parte de Ana.
Lo más visto del jueves 23 de junio fue el Bailando 2011 en ShowMatch (El Trece) con 26.4 puntos de rating. Segundo se ubicó Herederos de una venganza con 22.6 y tercero Los Únicos (17.7). Telenoche hizo 11.8.
En Telefe lo mejor pasó por Susana Giménez con 14.6 puntos. Antes, Telefe Noticias (19) marcó 11.6 y El elegido, 11.2.
En Canal 9, Bendita fue lo más destacado con 7.6.
En América, Intrusos fue lo más visto con 7.3 puntos. Luego, Los unos y los otros promedió 7.1, mientras que América Noticias hizo 6.9.
En Canal Siete, lo mejor fue Encuentro con 3.6.
El rating del jueves por emisoras: El Trece ganó el día con 12.7 puntos de promedio, Telefe quedó más atrás con 9.4, Canal 9 (6.1), América (5.7) y Canal Siete (1.9).
María Eugenia Ritó festejó sus 33 años con una alocada fiesta en un famoso boliche del barrio porteño de Palermo en la que no faltó alcohol ni carnaval carioca.
"Prefiero no decir cuántos cumplí. Mejor digamos que soy una quinceañera festejando", arrancó la vedette en medio de la euforia del festejo, según publica la revista Paparazzi.
Sol Donato comenzó su vida como Juan. Es XXY, un hombre biológico con baja cantidad de estrógenos. Pero ella se operó para acentuar su femineidad. Quiere ser modelo.
A los 14 años le informaron que había nacido sin vagina ni útero, y le prometieron transformarlo en una "mujer de verdad". Bajo una fortísima coacción médica y familiar, a los 16 años se le practicó una vaginoplastia (cirugía para dotarlo de una vagina funcional). Esto significó años de tormentos –la cirugía hizo necesaria otra después, y luego seis años de ilataciones (del espacio abierto quirúgicamente) bajo anestesia general–, que aún hoy él vive como una larga violación. "El cuerpo tiene una materialidad resistente, no se queda donde lo ponen, se descose cuando lo cosen. Esa es la lucha de los médicos", dice Mauro, pero aclara con una madurez nacida a golpes que no culpa a los médicos. "Viven en la misma cultura que yo, donde hay crueldades que parecen aceptables. Por eso entiendo sus decisiones, aunque me parezcan equivocadas. Pensar críticamente la intersexualidad implica admitir que no se sabe: no se sabe qué es lo que va a hacer feliz al otro, qué es lo que convierte en mujer a una mujer. Y si no sé eso, no voy a cortar su cuerpo, porque lo único que sé es que donde uno corta, la persona deja de sentir." (Clarin)