
Los malvivientes pasaron frente al personal de seguridad como supuestos clientes o interesados en los tratamientos que allí se prestan, sin levantar ninguna sospecha.
“Había una reunión de capacitación y entraron cuatro hombres armados y empezaron a gritar. Había uno de ellos que estaba desorbitado y las mujeres estaban aterradas”, indicó el médico en C5N.
Además, relató que se llevaron computadoras, dinero, celulares , entre otras pertenencias personales: “Es la tercera vez que roban en el año. Esto ya es parte de la vida cotidiana, desgraciadamente”.
“No golpearon ni mataron a nadie. Una vez más, la sensación de inseguridad”, ironizó el célebre doctor.