2 oct 2009

Las extrañas fotografías de Nazarena Vélez

Nazarena Vélez fue generando un gran reality a lo largo de su vida. Desde los comienzos entendió que ese era el rol que le tocaba jugar en la televisión argentina, y no se equivocó en el papel que le hurga jugar. Va y va por más. Con verdades y mentiras, aunque este último concepto parece repetirse hasta el hartazgo en cada una de sus historias.

Desde los dinosaurios para acá – el romance con Hernán Caire – la rubia ha mostrado todo, absolutamente todo. Se enamoró y se peló en tevé. Tuvo constantes avatares que en algunos casos no llegaban a superar la semana. Por eso, ahora todo duele más. Por eso, cuando abrís la puerta es muy difícil cerrarla. Le pasó a Silvia Süller, que hoy mendiga cámaras en vaya a saber qué boliche.
Y así pasan las figuritas. Porque la picadora de carne te usa, te exprime, pero si no le devolvés al menos un dejo de talento, te come como un león famélico. El vaticinio de la prensa parece cumplirse con la precisión de un chapista de barrio. Todos pusieron en duda su nuevo embarazo. Hoy, la historia parece juzgarla una vez más, aunque tal vez en esta ocasión su pasado la condena.

Hace pocas semanas, la rubia confirmaba en el ciclo de Marcelo Tinelli que se encontraba nuevamente en la dulce espera. Pero, sus insistentes apariciones en una disco de Olivos pusieron otra vez un manto de duda.
Anoche, Nazarena llamó a los productores de Ideas del Sur para comunicarles que había perdido el supuesto embarazo y que en tres semanas se reincorporará al certamen de baile. La noticia llegó a los medios de comunicación, un día después de la aparición de tres imágenes.

Este medio, como tantos otros, recibió por mail un material fotográfico de la rubia y su pareja, Fabián Rodríguez, a quienes se los ve bastante sueltos de ropa y felices por estar posando de esa manera. Asimismo, se asegura que esas fotos están girando por la red y que es muy probable que las haya digitado para volver a tomar exposición pública.

Por lo pronto, el duelo de los tortolitos se suscita a través de un material inédito de la intimidad de la pareja, luego de galantearse con la maternidad, como si fuese un tema liviano y sin connotación alguna.

Fuente: Primicias Ya

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